Los REAL Cupcakes de Frutilla

En el último par de años ha existido un florecimiento de cupcakes en Chile. Cupcakes everywhere.
Sin embargo, me parece que no han podido ser capturados en su esplendor. Más bien, ha sido reproducida su forma, pero su contenido ha sido pasado por alto. Y es que si bien gran parte de su gracia es que son individuales y visualmente adorables, lo mejor de ellos es la perfecta armonía de su composición: un bizcocho aireado y rico cubierto en glaseado cremoso y dulce, que asegura sellar la humedad del bizcocho.
Y claro, venden esos sucedáneos de cupcakes, que son mezcla de queque preparado en moldes de cupcakes y cubiertos con chocolate derretido. Por mucho que puedan parecerse a un cupcake, no lo son ni lo serán.


Aaahh... el gran dilema de la forma y el fondo increíblemente tiene aplicación en el mundo de los cupcakes.

La receta de hoy es la que salió en la Revista YA y debería haberla subido hace harto tiempo pero quehaceres universitarios me han detenido. Pero, más vale tarde que nunca, aquí está. Son cupcakes de frutilla. Y son perfectos. Y rosados. Y kitsch.

No sé porqué esta foto me hace inmensamente feliz.

El bizcocho es de frutillas. Lleva puré de frutillas dentro y frutillas picadas. Eso les da un exquisito sabor a esta fruta y lo mejor, es que salen del horno con una leve tonalidad rosada encantadora. Luego, el glaseado, o frosting, es un buttercream de frutillas.
El buttercream es una preparación gringa extremadamente insalubre. Pero muy rica. Es básicamente mantequilla y azúcar flor en cantidades tan mounstruosas que constriñen las arterias con tan solo prepararla. Pero, reitero, muy rica. Además de eso lleva puré de frutillas lo que le otorga un color rosado adorable y que, además, permite pensar que contiene al menos un ingrediente sano y que, por lo tanto, no estamos ingiriendo las calorías del mes al comerlo. Cualquier posibilidad de auto-mentirse en cuanto a calorías es apreciada acá en Magdalena Cocina. Así me sostengo mentalmente.
Todo eso se corona con una frutilla y voilá! Un cupcake perfecto.

La receta no tiene nada de complicado. Sólo son hartos pasos.
Puede ser horneada tanto en papelitos de cupcakes (los típicos que venden en los supermercados, en el pasillo de cumpleaños) o bien, directamente en el molde enmantequillado.
Yo prefiero con papelitos, como se hace de forma tradicional, pero el día que los hice (que fue el día de la sesión de fotos para la revista), no me quedaban muchos, así que hice algunos directamente en el molde.
De cualquier modo, estos sí que si son verdaderos cupcakes.

Cupcakes de Frutilla

Receta adaptada de Martha Stewart

12 cupcakes

Para los Cupcakes

2/3 taza frutillas frescas o bien congeladas, descongeladas
1 ½ taza harina, cernida
1 cdita. Polvos de hornear
¼ cdita. Sal
¼ taza leche entere
1 cdita. Extracto de vainilla.
125 grs mantequilla
1 taza de azúcar
1 huevo entero
2 claras de huevos

En la procesadora moler las frutillas. Es necesario obtener alrededor de 1/3 taza de puré de frutillas. Verter en un pequeño jarro y mezclar con la leche y vainilla.
En un bowl mediano y con un batidor de mano, mezclar harina, polvos de hornear y sal.
En un bowl grande, y ahora sí con batidora eléctrica, cremar la mantequilla hasta que alcance una consistencia liviana y aireada. Gradualmente agregar el sugar y batir hasta que esté bien combinado. Reducir la velocidad de la batidora y agregar el huevo y las claras; batir sólo hasta que esté incorporado. Luego, añadir la mitad de la mezcla de harina y mezclar. Verter la mezcla de frutillas y leche y mezclar. Terminar con el resto de la harina, mezclando todo con una espátula (la idea es no incoroporar aire a la masa por medio del batido después de agregarle los huevos. Por eso los tiempos de batido son cortos).
Dividir la mezcla en 12 moldes de muffins, preparados con una cápsula de cupcakes. Hornear por 22-25 minutos en un horno precalentado a 180°C (horno medio) o hasta que la parte de arriba esté apenas seca al tacto.
Dejar enfriar antes de glasear.


Para el Glaseado

½ taza de frutillas frescas o bien congeladas, descongeladas
250 grs. Mantequilla sin sal, ligeramente fría
3 tazas de azúcar flor
1 cdita. Esencia se vainilla

En la procesadora moler las frutillas.
En un bowl grande batir la mantequilla con batidor eléctrico, hasta que esté liviana y aireada. Reducir la velocidad de la velocidad y lentamente agregar la azúcar flor, batiendo hasta que esté bien mezclados. Agregar la vainilla y el puré de frutillas, cuidando de ir agregando cucharada a cucharada (para evitar que se separe). Batir sólo hasta que esté bien incorporado (tampoco queremos incoporar aire). La textura debe ser densa y cremosa, cuál helado.
Glasear los cupcakes. Esto se puede hacer mediante una manga con una boquilla gruesa o bien, con una pequeña espátula directamente sobre la superficie. Coronar con una frutilla.