Por alguna razón, todavía hay frutillas en las ferias y
puestos de frutas y verduras en las calles, a precios aún razonables (a
diferencia de los frutos rojos del supermercado, en donde 100 gramos de
frambuesas cuestan como 2500 pesos, dios
mío). Esto me ha puesto muy feliz, y un
día de aquellos, me he sentido compelida
por fuerzas interiores e incontrolables, superiores a mi racionalidad a comprar
2 kilos de frutillas a la salida de mi universidad. Y qué hace una pobre
cachorra como yo con 2 kilos de frutillas en pleno otoño?
La respuesta es una sola: trifle. Y amigos todos, qué
felicidad el trifle.
El trifle es algo así como una torta de construida: se ponen
capas de bizcocho, cubiertas con capas de alguna crema o relleno untuoso y
capas de fruta. Luego se repiten las capas. Luego se deja reposar en el frío, y
todo se moja y humecta lo uno con lo otro, y queda taaaaaaaaaaaaan rico.
En esta receta, la parte del bizcocho está compuesta por un
bizcocho liviano, liviano, hecho con 6 claras. Luego, la parte cremosa-untuosa,
es una crema hecha por una crema inglesa de vainilla mezclada con queso crema y
crema batida, lo que genera una crema suave y deliciosa, sin ser excesivamente
dulce. Finalmente, la parte de la fruta es una compota de frutillas, muy
sencilla y rápida.
Si bien dejo a continuación todas las recetas, lo genial del
trifle es que todo es reemplazable, por otra receta que prefieran, o bien, por
sucedáneos comprados en el supermercado. Por ejemplo, pueden comprar de esos
bizcochos hechos, si les da lata hacer el suyo, o bien, usar budín de vainilla
en vez de hacer su propia crema inglesa. Y cambiar las frutillas por berries
congelados, o hacer una compota de manzanas, o usar fruta fresca. No sé. Lo que
sea. Es toda la gracia y belleza del trifle.
Acá mismo en el blog, había puesto ya otra alternativa de
trifle, en la que usaba un bizcocho más denso de almendras y frutillas frescas.
Pueden revisar la receta acá.
En fin, toda la idea del trifle es hacer capas de distintos ingredientes, texturas y sabores. Sólo recuerden dejarlo reposar para que todo se mezcle entre todo, y se vuelva una ambrosía inseparable.
Regocijaos.
Trifle de bizcocho liviano, crema de vainilla y queso crema y compota de frutillas
Adaptado de: Browned Eyed Baker
Rinde: 6-5 porciones generosas
- 1 bizcocho liviano (receta a continuación)
- 1 receta de crema de vainilla y queso crema (receta a continuación)
- 1 receta de compota de frutillas (receta a continuación)
Cortar el bizcocho en cubos de alrededor de 2x2 cms. No es
necesario que queden todos del mismo tamaño ni en perfecta forma.
Poner en un vaso ancho una capa de bizcocho (cubrir todo el
fondo con los cubos).
Cubrir el bizcocho con una capa del almíbar de la compota de
las frutillas, seguida por una cucharada (generosidad a gusto) de la compota de
frutillas.
Cubrir esa capa con la crema.
Repetir las capas, en el mismo orden.
Para llenar una copa use, me bastaron 2 capas, sin embargo,
depende de la copa o vaso que usen la cantidad de capas que bastaran para llenarla.
Alternativamente, se puede hacer en un copón grande, y luego
servirlo con una cuchara en los platos individuales.
Bizcocho liviano (Angel Food Cake)
Adaptado de: Cookie Madness
3/4 taza + 2 cucharadas
1 pizca sal
1/2 taza + 1 cda. harina cake
6 claras de huevo
3/4 cdita. crema tártara
1/2 cdita. esencia de vainilla.
En la procesadora, moler la azúcar hasta que esté muy fina, casi como azúcar flor. Al ojo, mezclar la mitad de esta azúcar con la harina y la sal. Cernir y dejar reservado.
En un bowl grande batir las claras a nieve. Una vez que estén espumosas, agregar la crema tártara y seguir batiendo hasta que las claras agarren consistencia y se puedan formar picos. Lentamente agregar la azúcar y la vainilla.
Agregar los secos cernidos al merengue y mezclar lentamente con una espátula. La idea es evitar que las claras pierdan volumen.
Poner la mezcla en un molde rectangular de 23 x 10 cms aproximadamente, cuyo fondo debe estar cubierto con papel mantequilla y sus lados, ligeramente aceitados.
Hornear por 35 minutos en un horno precalentado a 180°C. Introducir un palito de brocheta y debe salir limpio. El bizcocho debe estar dorado y esponjoso al tacto.
Dejar enfriar.
Crema de Vainilla y Queso Crema
Adaptada de: The Kiwi Cook y Brown Eyed Baker
1 vaina de vainilla
250 ml de crema
150 ml de leche entera
3 yemas de huevo
1/3 taza de azúcar
1/2 paquete de queso crema (alrededor de 110 gramos, 4 onzas)
1/2 taza de azúcar flor
1 taza de crema para batir, fría
Abrir la vaina de vainilla a lo largo, y raspar las semillas con un cuchillo. Agregar las semillas junto con la vaina a una olla o sartén, con la crema y la leche. Llevar a hervor.
En un bowl grande, batir las yemas con la azúcar hasta que estén pálidas y espesas. Agregar 1/4 de taza de la leche caliente a las yemas y batir. Luego, en forma de hilo agregar lentamente el resto de la leche caliente a las yemas (la idea es evitar de que las yemas se cuezan cual huevos revueltos con el calor de la leche).
Voltear la mezcla nuevamente a la sartén u olla y, siempre revolviendo, calentar hasta que se espese. El punto que se debe alcanzar es que la parte trasera de una cuchara de palo pueda ser cubierta con la crema (alrededor de 80°C) .
Retirar del fuego y pasar por un cedazo. Dejar enfriar.
Aparte, batir el queso crema con la azúcar flor hasta que esté cremoso y aireado. Agregar la preparación anterior y mezclar bien.
En otro bowl, batir la crema fría hasta que tome consistencia. Con una espátula, agregar a la mezcla de crema de vainilla y queso crema, y mezclar de forma envolvente, tratando de evitar que se "desinfle".
Dejar reposar en el refrigerador hasta su uso.
Compota de Frutillas
1 kilo de frutillas frescas
1/2 taza de agua
1/3 - 1/2 taza de azúcar (moderar a gusto)
jugo de 1 limón
Limpiar las frutillas y cortarlas en cuartos.
Poner la mitad de las frutillas en una sartén grande, junto con el agua, azúcar y jugo de limón. Hervir a fuego bajo hasta que las frutillas se empiecen a deshacer. Agregar el resto de las frutillas picadas y hervir sólo hasta que estén ligeramente blandas.
Dejar enfriar.
Pero que riicooo, me antoje a mil!!, será mi receta de mañana! :D!
ResponderEliminarSaludos,
Fabiola
https://katzecupcakes.blogspot.com
Gracias Kitty! Cuéntame qué tal te va después.
ResponderEliminarQue rico se ve! Me encanta el trifle!
ResponderEliminarGracias Gloria! Saludos
EliminarHola Magda, tu trifle se ve maravilloso y que curioso que aún haya frutillas en las ferias por allá.
ResponderEliminarNosotros en Europa estamos disfrutando de plena época de frutillas y las estoy usando en montones de recetas. (Luego se acaban las de temporada y se ponen carísimas las importadas o de invernadero)
Muy lindas tus fotos.
Saludos
Hola Nathalia!
EliminarEs lo mejor la fruta temporada! Estaré pendiente a los usos que les das.
Sldos!
Ohh Magdalena es un lujo de postre me encanta ...que ricura,abrazos
ResponderEliminarGracias Rosita
EliminarTu ya sabes, cuando te aburras de ser un profeta incomprendido en tu tierra, serás bienvenida en mi casa. Puedes pagar tu arrendamiento cocinando.
ResponderEliminar(algún día me atreveré a cocinar algunas de estas maravillas)
jajajajajaj
Eliminargracias cata. mantendré esta carta bajo la manga
Hola Magda! Este triffle es un espectáculo, te quedó demasiado bueno, el bizcocho de angel cake me parece que le da un toque muy especial y la crema es también muy buena. NO sé qué más decirte, salvo que ¡no puedo comer dulces! (: snifff moriré de tristeza cualquier día de estos, pero igual este triffle merece todo mi respeto y admiración y lo haré para esos seres malvados que son mis hijos que sí pueden comerlo :) Ahh, otra cosa: No puedo dejar de pensar en Rachel de Friends poniéndole carne molida a un triffle para un Thanksgiving! Besos
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