El cake de la controversia

El mazapán es un tema controvertido. Igual que la fruta confitada en los panes de pascua. Y las pasas en las empanadas. También el asunto limítrofe entre Chile y Bolivia. Judíos y Palestinos. Aborto. Reformas o Revolución. Reality shows. Ena Von Baer.

Así, hay gente que ama el mazapán y siente que daría su vida por él. Y hay otro tanto de gente que lo odia y estaría dispuesto a morir en vez de probar un bocado.

Quizás no sea tan drástico.

Me gustan las hipérboles.

Me gusta usar la palabra hipérbole en vez de la palabra exageración.

Estoy muy dispersa hoy.

Da lo mismo. O te gusta o no te gusta el mazapán.

A mí me encanta. Y la receta de hoy es sólo para aquellos de mi bando.

Recién desmoldado. A una lluvia de azúcar flor y un puñado de frutillas de estar listo para servir.

Sucede que tengo una pequeña tendencia vanguardista-capitalista consistente en comprar todos los ingredientes nuevos que vea en el supermercado. Resultado de esta psicopatología es que hay muchos ingredientes acumulados en mi despensa sin jamás haber tenido uso. Pero también hay muchos sabores y recetas nuevas que he podido descubrir.
Caso en cuestión: la receta de hoy. Este bellísimo, maravilloso cake de almendras. Que sabe a mazapán.

Voilà!

Para esta ocasión, encontré en el super (aún a pesar del incidente "Ratas", me mantengo fiel al Jumbo Bilbao), en el pasillo de insumos de repostería, una lata de pastas de almendras. Y la tuve que comprar. Si no la compraba mi ansiedad subiría a niveles infartantes y moriría de abstinencia. Así que la compré. Creo que me costó como $3000, lo que es bastante caro considerando que son como 8 onzas. Pero bueno, nadie es perfecto.

La pasta de almendras se diferencia del mazapán en que ésta tiene mucha menos azúcar y es menos maleable. Es decir, es un ingrediente propiamente dicho. No sirve como elemento decorativo como sí sirve el mazapán.
Pero... sabe irremediablemente a mazapán. Así que este cake, sabe a mazapán. A controvertido mazapán. Por lo tanto, si a ud. no le gusta el mazapán, aléjese de esta receta. Huya, huya a otra parte.

Pero si sí le gusta el mazapán, ahhh... ha encontrado aquí un tesoro. Esta receta es magnífica. Se acaba de convertir en uno de mis cakes preferidos. Es denso, húmedo y taaaaaan sabroso. Su preparación no es difícil, exceptuando el hecho de que requiere este ingrediente que no es tan corriente, pero aparte de ello, no hay mayor dificultad. Se le agrega además harina de almendras (que se compra en tiendas de cocina), esencia de almendras y almendras fileteadas encima, de modo de que el sabor es inminentemente almendrado.

Yo lo serví acompañado de una salsa de frambuesas frescas. Me parecía que el sabor cálido de las almendras necesita contrastar con uno más liviano, ácido y fresco. Así que opté por el coulis, que es básicamente frambuesas, un poco de azúcar flor y limón licuados, resultando en una salsa fresca y bien ácida. Queda perfecto con el cake, aunque, es perfectamente maravilloso por sí solo.

Cake de Almendras

Receta adaptada de David Levobitz

Un bizcocho de 23-25 cms.

1 1/3 taza azúcar
8 onzas pasta de almendra (un tarrito)
1/2 + 1/4 taza harina
1/4 taza harina de almendras (almendras molidas)
225 grs. mantequilla, a temperatura ambiente
1 1/2 cucharadita polvos de hornear
3/4 cucharadita de sal
1 cucharadita esencia de vainilla
1 cucharadita esencia de almendras
6 huevos
Almendras fileteadas

En la procesadora moler la azúcar, pasta de almendras y 1/4 taza de harina, hasta que esté todo molido e incorporado, con una textura similar a la arena.
En un bowl pequeño mezclar la 1/2 de taza restantes de harina, la harina de almendras, los polvos de hornear y sal.

Poner la mezcla de pasta de almendras en un bowl grande y agregar la mantequilla, cortada en cubos. Batir hasta que esté suave y aireada. Agregar las esencias.
Seguir con los huevos, incorporándolos uno a uno, batiendo unos 30 segundos después de cada adición.
Agregar la mezcla de harina y batir sólo hasta que esté mezclado.

Verter la preparación a un molde redondo de bizcocho de 23-25 cms, previamente enmantequillado y cubierto en el fondo con papel de mantequilla enmantequillado. Hornear por 65 minutos en un horno precalentado a 180°C (horno medio) o hasta que el cake esté bien dorado y se sienta firme cuando con los dedos presionen el centro.

Retirar del horno y esperar a que se entibie antes de desmoldar. Es posible que se hunda un poco el centro. Servir con salsa de frambuesa.


Salsa de Frambuesa

En realidad esta receta la hago al ojímetro, pero pongo las cantidades aproximadas. Jueguen uds. con la acidez y dulzura, agregando o quitando limón o azúcar.

2 tazas de frambuesas frescas o bien congeladas, descongeladas
1/3 taza azúcar flor
3 cucharadas jugo de limón

Licuar todos los ingredientes hasta que estén molidas las frambuesas. Si se desea se puede pasar por un cedazo para colar las pepitas de las frambuesas.