Hasta la próxima temporada, duraznos queridos.

Tengo otro pie.

Este es de durazno.

Y es cuadrado.

Y es rico, rico, rico.

Llegué a este pie por dos razones:
1. Quería hacer pie de durazno, porque a) los duraznos son manjar de los Dioses, ambrosía primorosa y nirvana estival; y porque, b) el pie, en general, es espléndido. Y entonces a) + b) = pie de durazno. Del todo lógico.
2.  Había visto en uno de mis libros de cocina un Slab Pie, que vendría a ser este pie cuadrado, con masa tanto arriba como abajo. La gracia de la confección sería que es mucho más cómoda que el pie normal redondo, y mucho más rendidor. Choriflai igual.



Bien:

- Se comienza con una masa de pie hojaldrada, como las varias que ya hay en este blog escrito por una persona adicta a los pies (acá una fácil y rica y acá una un poco más trabajosa pero increíblemente maravillosa), cuya principal diferencia es que es una receta grande, porque se requiere bastante masa (molde grande, 2 capas).

- Se cubre un molde que sirva para el horno cuadrado con la mitad de la masa estirada, y se espolvorea una mezcla 50/50 de azúcar y harina en la base. Esto evita que la parte de abajo absorba todos los jugos y queda lánguida y babosa.

- El relleno es simple, pero majestuoso: son nada más duraznos picados, con un poco de azúcar, un poco de jugo de limón y un poco de canela. Además, lleva maizena para evitar que se espese el líquido que sale de los duraznos. Ahora bien, también se pueden usar otras frutas como manzanas, o incluso guindas!. Una nota: la receta decía 7 tasas de fruta... lo que yo encontré un poco mucho. La bajaría a 6 tasas de repetir la receta.

- Se cubre con la otra mitad de la masa estirada. Se pincha para que salga el vapor de la fruta.



Luego de horneada, saldrá bella, dorada y rebosante de jugos frutales del edén.

Un último paso, totalmente opcional,  por cierto, es glasear la parte superior, con un glaseado sencillo de azúcar flor y leche. Lo único que hace esto es darle un acabado más bonito al pie y sumarle un poco más de dulzor, que ¡ojo! no es tanto, ya que la masa no tiene casi nada de azúcar, y el relleno, apenitas un poco. Personalmente encuentro que quedaba bien bueno con el glaseado.

Para hacer estas líneas de glaseado, simplemente puse el glasé en una bolsa Ziploc, le corté la punta y deje caer el glaseado.

Y eso!
Es una receta bieeeeen buena. Bastante fácil, muy rendidora y rica, rica. El mejor momento para consumirla es mientras se encuentra tibia, aunque se encontrará un poco más jugosa en ese entonces (una vez que se enfría el relleno se asienta bastante).

Ideal para despedirse de la dulce y - oh, siempre tan efímera - temporada de melocotones.

Pie de Durazno Cuadrado

Receta adaptada de: Martha Stewart's Baking Handbook

Masa Brisee para Pie Cuadrado (receta a continuación)
7 tazas de duraznos picados (o manzanas o guindas). Nota: sugiero bajar la cantidad a 6 tazas. 
1 taza de azúcar
1/4 taza de maizena
1 cdita. canela en polvo
jugo de 1 limón

1 cda. harina
1 cda. azúcar

Estirar una de las mitades de masa hasta que sea más grande que el molde. Luego, cubrir un molde rectangular apto para el horno de alrededor de 28 x 18 cms. Cortar los excedentes.

Para hacer el relleno, simplemente mezclar todos los ingredientes.

Mezclar la harina y la azúcar. Poner en el fondo del pie. Verter el relleno encima.

Estirar el otro pedazo de masa y cubrir el pie. Cortar los excedentes. Pinchar con un tenedor.

Hornear por 40 a 55 minutos en un horno precalentado a 180°C, o hasta que esté dorado y el relleno burbujee por los costados. Esperar a que se entibie para servir.

Masa Brisee para Pie Cuadrado

Alcanza perfecto para las dos capas.

Recomiendo revisar este post para ilustrarse acerca de cómo mezclar la grasa a la harina.

3 3/4 taza harina

2 cditas. de sal

2 cdas. azúcar

375 grs. de mantequilla, helada, cortada en pedazos

1/2 taza agua helada, en caso de que fuera necesario

Mezclar la harina, sal y azúcar. 

Agregar los pedazos de mantequilla e incorporarlos con un cortador o mezclador de masas. La idea acá es que la mantequilla quede en pedazos pequeños de distintos tamaños y formas, pero que no se funda todo en una masa homogénea. Por eso es que la mantequilla se encuentra helada, para evitar que se derrita.
Sin amasar, sino que meramente haciendo presión, formar un bollo con la masa. Si fuera imposible unificar la masa, agregar agua helada poco a poco.
Alternativamente, también se podría hacer en una procesadora.

Dividir la masa en dos mitades, una ligeramente más grande que la otra. Envolver en papel plástico y refrigerar por al menos 2 horas. Se puede congelar.