miércoles, 27 de diciembre de 2017

Galletitas Morenas de Miel y Canela

Más vale tarde que nunca, así es que sigamos con las galletitas. La receta de hoy: Galletitas Morenas de Miel y Canela.



Esta receta corresponde a las “graham crackers” americanas, que, al parecer, los gringos utilizan mucho, por ejemplo, para hacer las bases de tartas o cheesecakes, o para hacer s'mores. Todos estos usos son perfectamente aceptables, pero completamente innecesarios: estas galletitas son deliciosas por sí solas.

Primero, su sabor: estas galletitas llevan miel y azúcar morena, lo que las hace sabrosas y morenitas.  Adicionalmente, las galletitas se espolvorean con una mezcla de azúcar rubia y canela antes de hornear, lo que aporta sabor y calidez. La canela se conjuga bellamente con el sabor a la miel, y aporta ese saborcito navideño. 

Luego, su textura. Todos hemos comido galletas de miel duras como palo, por lo que podría entender si tuvieran la aprensión de que estas galletitas fueran así. Pero no se preocupen, amigues, no es el caso. Claro está, no son galletas húmedas ni blandas, pero no tienen esa dureza rompe dientes que a veces caracteriza a las galletas de miel. Ello porque la azúcar morena aporta humedad, y también porque la masa se estira delgadita, de forma tal que las galletas resultan en un bocado crujiente y fácil.


La preparación es felizmente sencilla. Las pueden hacer en una procesadora, o con batidora. Podrían incluso hacerlas a mano si quisieran. En términos sencillos, parte con los ingredientes secos (entre los que se encuentra 1 taza de harina integral), los cuales se mezclan con mantequilla fría. La idea es integrar la mantequilla hasta que solo queden pedacitos muy pequeños, pero sin que se incorpore totalmente a la masa. A eso se le agregan el resto de los ingredientes, y listo, la masa está preparada. 

La masa resultará blanda, por lo que intercalaremos golpes de frío. Primero, se refrigera la masa, y luego, las galletitas ya formadas se congelan por unos 20 minutos antes de hornear. Justo antes del horno, como les decía, un poquito de azúcar canela. Respecto al horneado, ojo. Como la masa es morenita per se, es fácil no percatarse de que las galletas ya están listas. Así es que se recomienda verificar a los 15 minutos de horneado Deben estar firmes al tacto, y doraditas en la base y apenitas alrededor de los bordes.

Otra pequeña advertencia: estas galletitas se pegan como pocas a la superficie en la que se horneen. La primera tanda la hice exclusivamente sobre papel mantequilla y tuve problemas para separarlas intactas. La segunda tanda la hice sobre papel mantequilla aceitado, y no hubo problemas, así es que procuren hacer este paso adicional. Pero a propósito de esto, quisiera ofrecerles un consejo para despegar cosas de papel mantequilla cuando la situación está problemática – que fue precisamente lo que hice yo para despegar la primera tanda: dar vuelta el papel mantequilla y pincelarlo con agua. La humedad hará que las galletitas (o un bizcocho, o lo que sea) se separen felizmente.



En el contexto de dulces navideños, sepan que estas babies  son idealísimas para regalar. Fáciles, duraderas, y especiadas. Además, la receta rinde un montóoooon, así es que pueden regalar a todos sus seres queridos y a los no queridos también. Pero además, en el contexto veraniego, sepan que son perfectas para acompañar una bocha generosa de helado de vainilla. O para servir junto al cafecito.

Galletitas Morenas de Miel y Canela


Receta adaptada de: Smitten Kitchen
Rinde: alrededor de 70 galletitas de 5 cms de diámetro

1 ½ taza + 3 cucharadas de harina corriente
1 taza de harina integral
1 taza de azúcar morena
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 pizca de sal
100 gramos de mantequilla muy fría, cortada en cubos
1/3 taza de miel
5 cucharadas de leche entera
2 cucharaditas de esencia de vainilla

3 cucharadas de azúcar rubia
1 cucharadita de canela en polvo

Para hacer la receta en procesadora: procesar las harinas, la azúcar, el bicarbonato y la sal para mezclar. Agregar la mantequilla fría y procesar en intervalos cortos, hasta que solo se puedan observar pedazos pequeños de mantequilla entre la harina. Agregar la miel, la leche y la vainilla y procesar hasta formar una masa.

Para hacer la mezcla a mano: mezclar en un bowl grande los ingredientes secos (harinas, azúcar, bicarbonato y sal). Con un cortador de masa, cortar la mantequilla dentro de los secos, hasta que solo se puedan observar pedazos pequeños de mantequilla entre la harina. Agregar la miel, la leche y la vainilla y mezclar con batidora apenas hasta que esté incorporado.

En ambos casos, la masa resultará blanda y pegote. Envolver la masa en papel plástico y refrigerar mínimo dos horas o hasta 3 días.

Sacar la masa del refrigerador y dividirla en dos. Trabajar con solo una porción de masa a la vez, y el resto, mantenerla en el refrigerador. Estirar delgada, de alrededor de 0,2-0,4 cms de grosor. Cortar con un molde de galletas o con una copa.

Poner las galletas en la bandeja y meter al freezer por alrededor de 20 minutos antes de hornear. Se pueden mantener en el freezer por hasta dos meses, cubiertas de plástico. En este intervalo, precalentar el horno a 180ºC y preparar la bandeja de horno, cubriéndola con papel mantequilla y pincelándola con aceite vegetal o bien aplicando spray antiadherente. Por otra parte, mezclar la azúcar rubia y la canela en un plato pequeño.

Para hornear, posicionar las galletas en la bandeja de horno preparada y espolvorear con la azúcar canela. Hornear en el horno precalentado por alrededor de 15 minutos o hasta que estén doradas en la base y firmes al tacto.

Dejar enfríar en una rejilla.

1 comentario:

Hay alguien al otro lado de la pantalla?!