sábado, 16 de noviembre de 2013

Para la calors, Torta de Ricotta y Limón

Pues bien, han empezado los meses cálidos. El tiempo temido ha llegado: ya no hay más suéteres, ni abrigos, ni bufandas en donde esconderse. Somos lo que somos al calor del sol. No hay perdón ni olvido de los pécados y la gula invernal. Todo esto bajo un genuino sentimiento de derretimiento corporal, de perspiración excesiva y que los pantalones se pegan en la zona de los muslos.

Al abochornante alero del gringo, cambian los antojos, desde luego. Comer algo más fresco es menester para no fundirse vivos, y comer algo más liviano es necesario para guardar estándares mínimos de decencia en la polera de tiritas.

Así que inauguramos la temporada Primavera-Verano en Magdalena Cocina. Sean uds. bienvenidos. 


La receta de hoy es una Torta de Ricotta y Limón. Es mi manera de enfrentarme a esta contingencia climática. Y es de-e-licioooooosa.

Está inspirada en tres hechos: 1) que tenía ricota en el refri, 2) que el sabor cítrico es refrescante y, 3) que empezaron a salir las frutas de verano, lo que me hace eternamente feliz.


Esta torta no es en realidad lo que yo describiría como una torta, pero tampoco es un bizcocho y a estas alturas del año no tengo creatividad para buscar otro nombre.
Pero la verdad es que es una suerte de bizcocho, pero que al tener ricotta resulta en una textura muy parecida a un cheesecake. De hecho, si jamás han probado un cheesecake de ricotta (como lo es el auténtico cheesecake italiano - porque el cheesecake con queso crema es una confección gringa-), notaran que esto es un poco parecido.


Es ligeramente ácido, porque la ricotta es un tanto ácida y también porque lleva harta ralladura de cítricos y jugo de limón. Además, está glaseado ligeramente con un glaseado sencillo de limón, lo que además de realzar la frescura y acidez de la torta misma, cumple la gravitante función de encerrar la humedad de la torta.

Le puse yo un poco de esencia de almendras dado que el limón va tan bien con las almendras, pero para un próxima vez le quitaría la esencia y enfatizaría más el aroma a limón o naranja, agregándolo o esencia de uno de ellos (con esencia de azhar quedaría maravilloso, ahora que lo pienso) o bien más jugo de limón en la preparación.






La textura es húmeda y compacta, pero en absoluto pesada. De hecho es bien liviano, y hasta, me parece a mí, medio elegante. O sea, al menos para servirlo de postre después de un almuerzo o cena.


La opción es definitivamente servirlo con frutas de la estación. Yo elegí cerezas y frutillas y la combinación era perfecta. Las cerezas combinan tan maravillosamente bien con las almendras, y como les decía, la torta tiene un sutil gusto a ella.
Pero bueno, las opciones son eternas. Pienso que con cualquier fruta ligeramente ácida debe quedar muy bien. Pienso por ejemplo con duraznos (macerados con un poco de azúcar para que liberen sus jugos) o mango quizás... frambuesas o incluso con mandarinas.



La preparación es relativamente sencilla, aunque hay que batir claras a nieve aparte (lo que es un paso adicional que puede desalentar a algunas), pero el resultado vale mucho la pena. Insisto.

Torta de Ricotta y Limón

Adaptada de: Baking Society

Para la torta:
1/2 taza + 2 cdas. de harina
2 cditas. de polvo de hornear
1 pizca de sal
170 grs. de mantequilla, a temperatura ambiente
3/4 taza de azúcar
3 huevos, claras y yemas separadas.
1 taza de ricotta (yo usé ricotta light, porque eso es lo que tenía y funcionó perfecto)
1/2 cdita. de esencia de almendras (opcional y reemplazable por esencia de limón o agua de azhar)
1 cda. de jugo de limón (yo recomendaría agregar hasta 3 cucharadas)
Ralladura de 1 limón
Ralladura de 1 naranja

Para el Glaseado:
1/2 taza de azúcar flor
2 cdas. de jugo de limón (o naranja)

Para preparar la torta, mezclar en un bowl pequeño la harina, polvos de hornear y la sal.
En un bowl grande, y con batidora eléctrica, batir la mantequilla, azúcar y ralladuras hasta obtener una consistencia cremosa y liviana. Agregar la esencia, yemas, ricotta y el jugo de limón y mezclar hasta que esté homogéneo. Agregar la harina y batir sólo hasta que esté incorporada.
En un bowl mediano, batir las claras a nieve. Luego, incorporarlas con suavidad a la mezcla de modo que no se pierda el aire (para ello, agregarlas de a poco y hacer movimientos envolventes con una espátula).
Verter la mezcla en un molde de bizcocho de 20 cms enmantequillado y cuya base esté cubierta con un papel de mantequilla también enmantequillado. Hornear por 45 minutos o hasta que al insertar un palito, éste salga limpio. Ojo! La superficie no se dora mucho.

Para preparar el glaseado, simplemente mezclar el azúcar flor y el jugo de limón. Se va a obtener una textura líquida. Si quedara muy espesa agregar más jugo de limón o agua, y por el contrario, si quedara muy líquida, agregar más azúcar flor. Esparcir con el reverso de una cuchara sobre el bizcocho ya frío.

Servir con frutas.

6 comentarios:

  1. Me tinco!!, intentare prepararla mañana , cuando tenga ricota.
    Me gusta tu blog!!!!!!!

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    Respuestas
    1. Hola!
      Lo preparaste?
      Cuéntame qué tal te fue.

      Saludos y gracias :D :D

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  2. 100% de acuerdo!! lo mejor es comer algo acido rico a media tarde .... mmmmmmm!!!!
    Muchos saludos!

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  3. Voy a probar con esta receta...luego te cuento que tal...!

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