miércoles, 28 de enero de 2015

Trifle de Verano laburando.

Es verano. Y quizás están leyendo esto desde el litoral chileno, comiendo machas a la parmesana mientras toman una cerveza helada. O quizás están en el Caribe, bailando cachete con cachete y pechito con pechito, mientras toman cerveza helada. O quizás están en el sudeste asiático, arriba de un elefante, comiendo pad thai y tomando una cerveza helada. O quizás están en Europa, disfrutando de todo lo que es el primer mundo, tomando una cerveza helada.

Qué bueno por uds., amigos todos. 

Lo que es mi trinchera, sepan ustedes que acá no hay dicha ni cerveza helada. Y digo esto para introducir el disclaimer de que escribo estás líneas desde la amargura propia de estar encerrada en Santiago durante el verano, trabajando para juntar unos morlacos.

Es el primer verano que paso trabajando. Y la vida es dura como obrera leguleya. Pero soy adicta al dinero. Y a los taxis (esa en verdad la más jevy adicción de mi vida: andar en taxi - junto a los puchos). Es mi cruz y mi maldición.

Pero bueno. En un intento desesperado por hacer este verano más ameno, he profitado de las frutas de temporada. La feria y los puestecitos de fruta y verdura están gloriosos.

Así nace la receta de hoy: Trifle de Verano.





Este trifle, como todos los trifles, es muy sencillo. Es la esencia del trifle, en verdad. Ser sencillito y delicioso.

El trifle es un postre en capas, que normalmente lleva algún tipo de bizcocho, algún tipo de crema pastelera, crema batida y fruta. Hay algunos varios dando vuelta por esta blog (como el de plátano y unos de frutilla). Como dijiera en otro post, el trifle es esencialmente una torta deconstruida. Por eso es tan sencillo. Porque no está la pretensión de armar una torta en toda su grandeza y entereza, sino que nada más disfrutar de la sinfonía de sus elementos.


Este trifle está compuesto de las siguientes capas:
  • Bizcocho. Acá usé un génoise que hice yo misma con estas manos de artesana, pero cualquier bizcocho servirá para el caso. De hecho,  bien pueden comprar un bizcocho en el súper y usarlo, pues con las siguientes capas se humedece en gloria y majestad y todo lo seco y malo que puede llegar a ser un bizcocho de esos que venden en el supermercado, se ve superado por la húmeda mescolanza del trifle.
  • Puré de frutas para humedecer el bizcocho. En particular, puré de frutillas y durazno, ilustre combinación estival. Se aplica en abundancia y con regocijo, pues humedece y une todo en una sinfonía veraniega.

  • Fruta fresca. Ahhh, tesoro de la temporada; recompensa de las deidades por tener que soportar estos calores atroces. Usé yo frutillas, duraznos, frambuesas y moras.


  • Crema pastelera. Este es el único elemento que es imperdonable no hacer uno mismo. La crema pastelera hecha en casa es tan insuperablemente mejor que la crema pastelera instantánea, aborrecible menjunje gelatinoso coloreado con tartazina. La crema pastelera hecha en casa, en cambio, es suave y aterciopelada, cremosa y maravillosa, de un suave color crema, y saborizado con vainilla verdadera.  

  • Crema batida. Sólo para dar más aire y liviandad a el trifle.
Todos estos componentes se van apilando el uno sobre el otro. Se puede hacer en un copón o bien en vasitos individuales, como es mi caso.

Acá yo hice sólo 2 capas de bizcocho. Coroné la última con el puré de frutas y un par de berries frescos.



Se deja refrigerar por al menos 3 horas y el resultado es riquísimo. El bizcocho se humedece con el puré de frutas, las frutas sueltan sus jugos celestiales, las cremas se ponen heladitas, y una cucharada es una bocanada de felicidad y frescura.

Un postre especial para aquellos enjaulados en este horno llamado Santiago por estos días de Enero.

Besitos.

Trifle de Verano

Adaptado de: Tartine

Rinde: 1 copón grande o alrededor de 12 porciones individuales (se puede hacer la mitad)

Acá todo es muy a gusto del consumidor, de forma de que todo es esencialmente variable. Lo único que quisiera destacar es que la fruta recomendada son berries de cualquier tipo, duraznos, damascos, mango, cerezas descarozadas, etc. No usar fruta como melones o sandía. La idea es usar la fruta lo más madura posible, especialmente para el puré, pues así tiene más sabor. Por último, no olvide de que usté es el amo y maestro de la cuestión, de modo de que agregue azúcar, unas gotitas de limón, pique la fruta como desee, y adicione todo lo que su alma pagana podría desear.


1 bizcocho simple (puede ser casero o comprado - yo pondré mi receta de génoise próximamente acá).
1 receta de puré de frutas (la receta sigue)
4 tazas de fruta de la estación
1 receta de crema pastelera (la receta sigue)
1 receta de crema batida (la receta sigue)

Cortar el bizcocho en tres capas.

Para hacerlo en porciones individuales: con un cortador redondo, o bien con una copa, cortar redondelas de una capa de bizcocho que sean del porte de la copa, vaso o pocillo en que se vaya a servir el trifle. 

Para hacerlo en un copón: si es necesario, recortar las capas de bizcocho de modo de que quepan en el copón. 

Se pone una primera capa en el recipiente respectivo.

Luego, humedecemos con el puré de frutas. La cantidad de puré para humedecer cada capa dependerá de cuántas capas de bizcocho tendrá nuestro trifle. En los pocillos individuales a mí me alcanzó para hacer dos capas de bizcocho. En un copón normalmente alcanzan tres,  pues es más profundo. Así entonces, verteremos la mitad del puré de frutas sobre la primera capa de bizcocho si usaremos 2 capas, o un tercio del puré si usamos tres capas. Hay que asegurarse de esparcirlo bien. No importa si el bizcocho no absorbe todo el puré instantáneamente; el tiempo se encargará de ello.

Seguimos con las frutas: se pone una capa de frutas sobre el bizcocho humedecido. La cantidad depende plenamente de su gusto.

A continuación, una capa de crema pastelera. La cantidad también depende del gusto.

Finalmente, una capa de crema batida. Lo mismo de antes respecto a la cantidad, aunque se recomienda no exagerar.

Se cubre todo con una nueva capa de bizcocho, el cual se remoja con el puré de frutas correspondiente. 

Se pueden repetir todas las capas de nuevo, o dejarlo hasta ahí. 

Se corona con un par de berries, y opcionalmente con un poco de crema batida. Se va al refri por al menos tres horas, pero es de lo más recomendable hacerlo la noche anterior para servirlo al almuerzo.

Puré de Frutas

2 ½ tazas de fruta de temporada
½ taza de azúcar
Jugo de ½ limón
1 cucharada de algún licor frutar (como Contriaeu, Grand Marnier) o vino blanco, opcional

La fruta se pica un poco y en una procesadora o mini pimer se procesa hasta que no queden pedazos enteros. Se agrega el azúcar, limón y licor, y se mezcla bien.

Crema Pastelera

2 tazas de leche entera
1 vaina de vainilla
6 yemas de huevo
½ taza de azúcar
1/4 taza de maicena
3 cucharadas de mantequilla

La vaina se vainilla se corta de forma transversal y con el mismo cuchillo se raspan las semillas de su interior. Se ponen en una olla junto a la leche y la vaina misma para que infusione la leche. Se calienta apenas hasta alcanzar el hervor.

Mientras la leche se calienta, se baten en un bowl grande las yemas con el azúcar y la maicena. 

Una vez que la leche hirvió, con un cucharón se retira un poco y se vierte a la mezcla de  yemas, siempre batiendo. La idea es temperar las yemas de forma de que no se cocinen solas sino en forma de crema. Repetimos 2 veces más (es decir, vertemos 3 cucharones de leche caliente mientras batimos) y luego, vertemos todo el resto de la leche, siempre batiendo.

El contenido del bowl lo volcamos a la misma olla donde se calentó la leche, y lo ponemos a fuego muy bajo. Siempre revolviendo, esperamos a que alcance el hervor y dejamos hervir por 1 minuto. Nunca dejar de revolver.

Apenas salga del calor, retiramos la vaina de vainilla y agregamos la mantequilla que se derretirá con el mismo calor de la crema.

Para reservar, la cubrimos con papel film en contacto con la superficie de la crema, de modo de evitar que se endurezca.

Crema batida

1 taza de crema para batir, FRÍA
2 cucharadas de azúcar flor
1 cucharadita de esencia de vainilla

Con batidora eléctrica batimos la crema y el azúcar hasta que espese.

Reservar en el frío.



6 comentarios:

  1. Hola Magdalena : leí con curiosidad tu blog y a poco andar me fue impresionando cada vez mas, no solo la idea de hacer criticas a los libros de cocina, no solo las recetas y hermosas ilustraciones , sino la manera tuya de escribir : divertida, honesta, simpática,y motivadora. Eres una estupenda escritora aparte de cocinera y futura abogada. Ahora no me queda otra cosa que hacer tu receta de los triffles !! Una sugerencia: podrías incluir recetas ricas pero de bajas calorías ??
    Felicitaciones Ma Teresa Peillard

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    Respuestas
    1. María Teresa, holaaaaaaaa!! Espero que mi madre no te haya obligado a leer esto!! jajajaj
      Muchísimas gracias por tu comentario bueno y dulce :D
      Y buenísima sugerencia: intentaré cranear algunas recetas más lights. Mis muslos lo agradecerían.

      Un abrazo y gracias de nuevo!

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